ALBA DE AMOR
Márcame con tu amor...
...Subiré a buscarte al monte de la
Márcame con tu amor...
...Subiré a buscarte al monte de la
mirra y al collado del incienso...
(Cantar de los cantares)
Márcame con tu amor, como a la esposa,
(Cantar de los cantares)
Márcame con tu amor, como a la esposa,
y aretes de tu voz ponle a mi oído.
Desnudo el corazón, dale vestido;
Desnudo el corazón, dale vestido;
morena el alma tórnala radiosa.
En tu bodega, de la Vid preciosa
En tu bodega, de la Vid preciosa
deja beber al labio enfebrecido.
fortalece mi pecho, que está herido
fortalece mi pecho, que está herido
con la granada que en tu sol se rosa.
Si en mi entraña quedáraste grabado,
Si en mi entraña quedáraste grabado,
florecerá en albor mi noche oscura...
Sostenme... desfallezco... hanme azotado
los vientos vida y alma. Amado mío.
Subo a ti en soledad de criatura,
los vientos vida y alma. Amado mío.
Subo a ti en soledad de criatura,
el corazón abierto a tu rocío...
Eva Cervantes
"Canciones de Eva" (1968)
Eva Cervantes
"Canciones de Eva" (1968)
Desde luego que esta poeta (o poetisa) sabía tocar las fibras del amor más terrenal con palabras celestiales.
ResponderEliminarEra sensacional en estos poemas sensuales, con un deje erótico ciertamente difícil de escribir. Fue gran amiga de mi padre y la recuerdo muy vagamente.
ResponderEliminarMe la imagino algo musa en aquellas rondas de poetas a la que asistía tu padre. La imagen más cándida y entrañable que he contemplado de "Noches del Baratillo" es aquella que apareció en ABC donde se te vé dormido en las faldas de tu madre en una de aquellas míticas sesiones de poesía. Pocos poetas pueden acreditar como tú que creciste entre versos...
ResponderEliminarRecuerdo, por lo que se hablaba en casa, que todos le tenían veneración. De la biblioteca de mi padre heredé varias obras suyas que las tengo como reliquias. Tendría que haber sido una mujer maravillosa en todos los órdenes.
ResponderEliminarLa fotografía aquella era hermosa. ¿Aún la recuerdas?