Ayer nos quedábamos en aquella canción humorística, "Soltera yo no me quedo", que Rafael de León le escribió a Juanita Reina para gritar a los cuatro vientos, solapadamente, su noviazgo con Federico Casado "Caracolillo". Pero ésta, también de Rafael con música del maestro Solano, titulada "En el último minuto" (1971), parece que es la composición seria. Es una hermosísima canción-bolero tanto en la letra como en la música, de las últimas del autor sevillano y de las últimas que estrenase Juanita. Una estupenda versión la grabó el pasado año el joven cantaor Miguel Poveda:
Yo andaba navegando por los treinta/ sin el amor que tanto deseaba,/ y entre mis labios, triste y macilenta/ una rosa sin tallo se quemaba./ Con desesperación buscaba un dueño/ y soñaba la cárcel de unos brazos,/ pero me despertaba de mi sueño/ con el alma sin voz hecha pedazos./ Y de pronto, en el último minuto,/ a punto de vestir de negro luto,/ te vi llegar, feliz, un mediodía,/ y el otoño sin rosas de mi espera/ se convirtió en florida primavera/ cuando se unió tu boca con la mía./ Y tu beso, en el último minuto,/ en rosa convirtió mi negro luto,/ y mi canción de pena en alegría./ Y por eso mil veces yo bendigo/ el día aquel que me encontré contigo/ cuando se unió tu boca con la mía,/ tu boca con la mía,/ con la mía.
De todo el inmenso repertorio de Juanita Reina, una de sus canciones preferidas, por ella y por sus admiradores, fue "Cinco Farolas" que, aunque la había grabado ya Conchita Piquer, ella la hizo suya y fue verdaderamente la que la convierte en obra maestra. En esta ocasión, la letra es de Ochaíta y Valerio y la música del maestro Solano. Como todas las coplas excelentes, fue versionada por muchas otras artistas, entre las que se encuentran Marifé, Carmen Flores, Rocío Jurado, Isabel Pantoja y Pasión Vega. El tuétano de la copla, casi como siempre, es el amor y las murmuraciones por las "lenguas de vecindonas" en unos años de una España terriblemente oscurantista. Fue siempre una de las canciones preferidas por Juanita:
Yo no escucho lo que dicen/ las lenguas de vecindonas,/ porque de sobra yo sé/ por quién está tu persona./ Cinco luceros azules/ alumbran cinco farolas/ desde su casa a mi casa,/ desde su boca a mi boca./ Cinco añitos que le quiero,/ cinco añitos que me adora,/ la mala gente qué sabe,/ qué sabe de nuestras cosas.// Si yo sé que me quiere, como le quiero,/ a qué darle tres cuartos al pregonero,/ desde su puerta misma hasta mi puerta/ la vereíta verde, no cría yerba, no cría yerba.// Yo no quiero ni saberlo,/ Vecina, cierre la boca/ y no me venga a decir/ que él va a casarse con otra./ Los cinco añitos cabales/ queriéndole hora tras hora/ son un cordel en mi cuello/ que la garganta me ahoga./ Con carbones encendidos,/ que le quemen esa boca/ al que juró tantas veces/ que estaba por mi persona.// Se apagaron las cinco, cinco farolas,/ pa que nadie me vea llorando a solas,/ ¡Ay, qué penita, madre, madre, qué pena!/ La vereíta verde, cuajá de yerba,/ cuajá de yerba.
Yo andaba navegando por los treinta/ sin el amor que tanto deseaba,/ y entre mis labios, triste y macilenta/ una rosa sin tallo se quemaba./ Con desesperación buscaba un dueño/ y soñaba la cárcel de unos brazos,/ pero me despertaba de mi sueño/ con el alma sin voz hecha pedazos./ Y de pronto, en el último minuto,/ a punto de vestir de negro luto,/ te vi llegar, feliz, un mediodía,/ y el otoño sin rosas de mi espera/ se convirtió en florida primavera/ cuando se unió tu boca con la mía./ Y tu beso, en el último minuto,/ en rosa convirtió mi negro luto,/ y mi canción de pena en alegría./ Y por eso mil veces yo bendigo/ el día aquel que me encontré contigo/ cuando se unió tu boca con la mía,/ tu boca con la mía,/ con la mía.
De todo el inmenso repertorio de Juanita Reina, una de sus canciones preferidas, por ella y por sus admiradores, fue "Cinco Farolas" que, aunque la había grabado ya Conchita Piquer, ella la hizo suya y fue verdaderamente la que la convierte en obra maestra. En esta ocasión, la letra es de Ochaíta y Valerio y la música del maestro Solano. Como todas las coplas excelentes, fue versionada por muchas otras artistas, entre las que se encuentran Marifé, Carmen Flores, Rocío Jurado, Isabel Pantoja y Pasión Vega. El tuétano de la copla, casi como siempre, es el amor y las murmuraciones por las "lenguas de vecindonas" en unos años de una España terriblemente oscurantista. Fue siempre una de las canciones preferidas por Juanita:
Yo no escucho lo que dicen/ las lenguas de vecindonas,/ porque de sobra yo sé/ por quién está tu persona./ Cinco luceros azules/ alumbran cinco farolas/ desde su casa a mi casa,/ desde su boca a mi boca./ Cinco añitos que le quiero,/ cinco añitos que me adora,/ la mala gente qué sabe,/ qué sabe de nuestras cosas.// Si yo sé que me quiere, como le quiero,/ a qué darle tres cuartos al pregonero,/ desde su puerta misma hasta mi puerta/ la vereíta verde, no cría yerba, no cría yerba.// Yo no quiero ni saberlo,/ Vecina, cierre la boca/ y no me venga a decir/ que él va a casarse con otra./ Los cinco añitos cabales/ queriéndole hora tras hora/ son un cordel en mi cuello/ que la garganta me ahoga./ Con carbones encendidos,/ que le quemen esa boca/ al que juró tantas veces/ que estaba por mi persona.// Se apagaron las cinco, cinco farolas,/ pa que nadie me vea llorando a solas,/ ¡Ay, qué penita, madre, madre, qué pena!/ La vereíta verde, cuajá de yerba,/ cuajá de yerba.
Otra de las grandes canciones de la artista macarena, de nuevo con la autoría de Quintero, León y Quiroga, que ella interpretaba con sublime majestad, es la titulada "Dicen", que de nuevo refleja en el texto la maledicencia de la anterior, la intromisión de la gente en las vidas de los demás por medio de la murmuración:
En el mismo punto y hora/ que acabó con Pepe Mora,/ doña Aurora sobre el pelo/ no se puso ni una flor,/ y su patio de cal pura/ un convento de clausura/ y una cárcel con cerrojos/ para el luto de su amor.// Dicen, dicen que lleva un velo sobre el semblante,/ dicen, dicen que si habla sola de madrugá,/ dicen, dicen que en sus ojazos como diamantes,/ brilla una luz extraña de oscuriá./ Y Sevilla a todas horas/ canta, canta, mire usted,/ que está blanca doña Aurora lo mismito que el papel./ Dicen, dicen que llora y llora por su querer.// Se ha casao Pepe Mora,/ y al momento doña Aurora,/ sus vestíos de esponsales/ desentierra del arcón,/ y de novia y con mantilla,/ por las calles de Sevilla,/ va una pena pregonando/ que ha perdío la razón.// Dicen, dicen que eran dos ascuas sus ojos moros,/ dicen, dicen que con un aire de majestad,/ dicen, dicen que fue repartiendo monedas de oro/ de una punta a otra de la ciudad./ Y a su paso los chiquillos para burla de su amor,/ Le tiraban papelillos y a puñados el arroz./ Dicen, dicen que era una pena ver su dolor.
Y para terminar con este breve recorrido que hemos realizado sobre las mejores canciones del repertorio de la gran Juanita Reina, vamos a poner una de sus canciones más representativas y alegres: "Carmen de España", canción que daba mucho para el lucimiento de la artista con el manejo de la bata de cola. Juanita, sabiendo que el público disfrutaba con este tema, se movía de una forma genial por el escenario con su habitual señorío y empaque. Fueron también sus autores Rafael de León, Antonio Quintero y Manuel López-Quiroga:
Yo soy Carmen la de España,/ cigarrera de Sevilla,/ y a los guapos de Triana/ hago andar de coronilla./ Pero no es verdad la historia/ que de mí escribió un francés,/ al que haría en pepitoria/ si volviese aquí otra vez./ ¡Iba a servirme de camafeo/ si traspasara los Pirineos!// Carmen de España ¡manola!/ Carmen de España ¡valiente!/ Carmen con bata de cola,/ pero cristina y decente./ No sé quién fue El Escamillo/ ni tampoco don José,/ y no manejo el cuchillo/ ni a la hora de comer./ Tengo fuego en las pestañas/ cuando miro a los gachés./ ¡Yo soy la Carmen de España,/ y no la de Merimé,/ y no la de Merimé!// Me han cantado en el teatro/ lo mismo que a "La Traviata",/ mas le aviso a más de cuatro/ que voy a meter la pata,/ pues me tiene hasta los pelos/ que ande suelta por ahí/ una Carmen de camelo/ que en ná se parece a mí./ ¡De los pinreles a la peineta/ yo le zurraba la pandereta!// (Refrán).
El dia 19 de marzo de 1999, su voz se iba definitivamente. Con ella se moriría también una de las épocas más hermosas de la canción. Juanita Reina, la gran sevillana, la gran macarena, desde aquel coro de la zarzuela en el Teatro Cervantes y aquella cancioncilla de "Salomé" había triunfado por todos los escenarios del mundo y había dejado cientos de canciones como patrimonio a todos los amantes de la copla, aquellos que, aunque no hubiese llevado en sus apellidos el de Reina, siempre la hubiesen llamado, y con razón, "La Reina de la Copla."
(En la fotografía, Juanita Reina)
En el mismo punto y hora/ que acabó con Pepe Mora,/ doña Aurora sobre el pelo/ no se puso ni una flor,/ y su patio de cal pura/ un convento de clausura/ y una cárcel con cerrojos/ para el luto de su amor.// Dicen, dicen que lleva un velo sobre el semblante,/ dicen, dicen que si habla sola de madrugá,/ dicen, dicen que en sus ojazos como diamantes,/ brilla una luz extraña de oscuriá./ Y Sevilla a todas horas/ canta, canta, mire usted,/ que está blanca doña Aurora lo mismito que el papel./ Dicen, dicen que llora y llora por su querer.// Se ha casao Pepe Mora,/ y al momento doña Aurora,/ sus vestíos de esponsales/ desentierra del arcón,/ y de novia y con mantilla,/ por las calles de Sevilla,/ va una pena pregonando/ que ha perdío la razón.// Dicen, dicen que eran dos ascuas sus ojos moros,/ dicen, dicen que con un aire de majestad,/ dicen, dicen que fue repartiendo monedas de oro/ de una punta a otra de la ciudad./ Y a su paso los chiquillos para burla de su amor,/ Le tiraban papelillos y a puñados el arroz./ Dicen, dicen que era una pena ver su dolor.
Y para terminar con este breve recorrido que hemos realizado sobre las mejores canciones del repertorio de la gran Juanita Reina, vamos a poner una de sus canciones más representativas y alegres: "Carmen de España", canción que daba mucho para el lucimiento de la artista con el manejo de la bata de cola. Juanita, sabiendo que el público disfrutaba con este tema, se movía de una forma genial por el escenario con su habitual señorío y empaque. Fueron también sus autores Rafael de León, Antonio Quintero y Manuel López-Quiroga:
Yo soy Carmen la de España,/ cigarrera de Sevilla,/ y a los guapos de Triana/ hago andar de coronilla./ Pero no es verdad la historia/ que de mí escribió un francés,/ al que haría en pepitoria/ si volviese aquí otra vez./ ¡Iba a servirme de camafeo/ si traspasara los Pirineos!// Carmen de España ¡manola!/ Carmen de España ¡valiente!/ Carmen con bata de cola,/ pero cristina y decente./ No sé quién fue El Escamillo/ ni tampoco don José,/ y no manejo el cuchillo/ ni a la hora de comer./ Tengo fuego en las pestañas/ cuando miro a los gachés./ ¡Yo soy la Carmen de España,/ y no la de Merimé,/ y no la de Merimé!// Me han cantado en el teatro/ lo mismo que a "La Traviata",/ mas le aviso a más de cuatro/ que voy a meter la pata,/ pues me tiene hasta los pelos/ que ande suelta por ahí/ una Carmen de camelo/ que en ná se parece a mí./ ¡De los pinreles a la peineta/ yo le zurraba la pandereta!// (Refrán).
El dia 19 de marzo de 1999, su voz se iba definitivamente. Con ella se moriría también una de las épocas más hermosas de la canción. Juanita Reina, la gran sevillana, la gran macarena, desde aquel coro de la zarzuela en el Teatro Cervantes y aquella cancioncilla de "Salomé" había triunfado por todos los escenarios del mundo y había dejado cientos de canciones como patrimonio a todos los amantes de la copla, aquellos que, aunque no hubiese llevado en sus apellidos el de Reina, siempre la hubiesen llamado, y con razón, "La Reina de la Copla."
(En la fotografía, Juanita Reina)
Juanita Reina era además de reina de la copla una gran interprete, no solo de sus canciones sino también del cine donde interpretó magistralmente a diversos personajes como, Lola la Piconera, La Lola se va a los puertos, Gloria Mairena, La novia de Juan lucero, etc, simpre con un elegante estilo y verdadera virtud de actriz. Una gran perdida fué su muerte para los suyos y sus imnumerables admiradores.
ResponderEliminarDe la pelicula interpretada por Juanita Reina "Vendaval", desaparecida, yo recuerdo, aunque la vi cuando tenia unos nueve años, su interpetación magistral de la canción "Lorito real"
ResponderEliminarComo admirador de la copla, tenia por costumbre ver ha todas las artistas del género, si bien la que a mi me atria más era Juanita Reina desde que la vi en el espectáculo "Sevilla, trono y tronio" en el que cantaba entre otras la canción "Con los ojitos abiertos" de Ochaita, Valerio y Solano.
ResponderEliminarSi que fue una gran pérdida la muerte de esta genial intérprete de la copla y del cine.
ResponderEliminarFué una gran pérdia porque jamás saldrá otra como ella, vendrás, eso si, nuevas interpretes, pero como Juanita cantaba y actuaba jamás se conocerá en otra artista
ResponderEliminarYo la admiré mucho, y también a su marido "Caracolillo", y tuve la suerte de compartir muchos momentos con ellos. Ha habido grandes artistas de la copla..., pero ella y Marifé y Concha Piquer le pusieron la emoción necesaria.
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