martes, 11 de mayo de 2010

CANCIONES POR NUESTRAS VIDAS: LOS ÉXITOS DE "LA GOYA"

Una de las más elegantes intérpretes en el escenario y de las más recatadas en el vestir, y gran intelectual en aquel tiempo en la que sus grandes rivales eran en su mayoría analfabetas, fue Aurora Purificación Mañanos Jaufrett, más conocida como "La Goya", apodo que le puso el escritor, letrista y gran estudioso del mundo del cuplé, Álvaro Retana. Bilbaína nacida en 1891, debutó con tan sólo 16 años en el Trianón-Palace de Madrid, logrando un gran éxito con esta "Tirana del trípili", cuya letra era del propio Álvaro y la música de Ruberto Chapí:

Soy un rayo de mi tierra/ y mi canto es luz de España./Soy un rayo de mi tierra/ y mi canto luz de España./ Y es mi orgullo ser perfume/ de la tierra de las majas./ Y es mi orgullo ser perfume/ de la tierra de las majas.// Con mi trípili, trípili, trípili.../ esta cancioncita se canta y se baila./ ¡Ay, mi chiquilla,/ ay, mi tirana,/ tú me has robado el alma!/ ¡Ay, mi chispera,/ baila con gracia/ que tú eres mi tirana!// España de mis amores,/ el día que yo me muera,/ España de mis amores,/ el día que yo me muera/ que me entierren en tu suelo/ y me cubra tu bandera./ Que me entierren en tu suelo/ y me cubra tu bandera.

La artista se presentaba en sus inicios como Aurora Jaufrett, pero se hizo tan famosa esta canción que estuvo a punto de ponerse el apodo de "La Tirana". Fue Álvaro Retana quien le recordó que ya hubo una mujer, primera dama de los teatros de la corte, con este nombre, María del Rosario Fernández, a quien Francisco de Goya pintó el año 1799. Barajando que a "La Tirana" la había pintado Goya, la ocurriencia del apodo ya estaba decidida. Coinciden todos los críticos en decir que fue ella quien elevó la canción al mundo de la cultura y quien llevó el oficio de cantante a actriz del cuplé, no gratuitamente le llamaron la "revolucionaria de la canción nacional" y "la tonadillera intelectual", ya que sabía inglés, francés e italiano, tocaba el piano y le encantaba escribir, pintar y rodearse con escritores como Jacinto Benavente, Martínez Sierra, Pedro de Répide, Linares Rivas, Sinesio Delgado, Ricardo Baroja, Valle-Inclán y Joaquín Dicenta, quien escribió su célebre melodrama "Juan José" pensando en ella, y en el que "La Goya" interpretó el papel de "Toñuela".

Tras un noviazgo largo y a la antigua con el torero sevillano de Tomares, Ricardo Torres "Bombita", tran romper con él se enamoró y contrajo matrimonio con el escritor y periodista, cronista oficial de Madrid, Tomás Borrás, más en su línea de la intelectualidad.

Otra de las grandes canciones de "La Goya", versionada más tarde por muchas artistas, entre otras Sara Montiel y Olga Ramos, fue la habanera "Ven y ven", con letra de Álvaro Retana y música de Rafael Gómez, estrenada en 1911: Acabo de acariciarte,/ no pierdo las esperanzas,/ con el tiempo y un ganchillo,/ mi vida,/ hasta las verdes se alcanzan.// Ven y ven y ven,/ chiquillo vente conmigo,/ no quiero para pegarte,/ mi vida,/ ya sabes pa lo que digo./ De todas als epidemias/ que en España pudo haber/ ninguna fue tan famosa,/ mi vida,/ como la del "ven y ven".// Dicen que los de tu casa/ ninguno me puede ver./ Déjalos batir el agua,/ mi vida,/ que, al cabo, la han de beber.// Porque canto el "ven y ven"/ se quejan mucha esposas/ de que luego sus maridos,/ mi vida,/ en casa las llamen sosas./ Creía mi prima Lupe/ que el matrimonio no es nada:/ pero se encontró con algo,/ mi vida,/ en cuanto estuvo casada./ El día que nació Rosa/ le oyó decir a mi madre:/ -Eres el vivo retrato,/ mi vida,/ de un amigo de tu padre.

Esta picaresca canción alcanzó desde su estreno un inusitado éxito. Nadie puede decir, y estamos a un casi a un siglo de su creación, que no la conoce.

Otro gran éxito de "la Goya", con letra de Ernesto Tecglen y música de Ricardo Yust, fue el célebre "El Balancé", también de la misma época que la anterior: Me ha pretendido un maleta/ y yo le he dicho que no;/ que un hombre que no se arrima/ ¿para que lo quiero yo?// Oh, balancé, balancé,/ balancé la nieve pura,/ canto esta linda canción/ con muchísima dulzura./ Con la moda que han sacado/ de fugarse las artistas/ se han decidido mis padres/ a no perderme de vista.

Y, también de aquellos mismos años, el no menos célebre "Tápame, tápame" con letra de López Monis y música de Ricardo Yust: En la playa se bañaba/ una niña angelical/ y acariciaban las olas/ su figura escultural./ al entrar en la caseta/ y quedarse en bañador,/ le decía a su bañero/ con acento encantandor:// Tápame, tápame, tápame,/tápame, tápame, que estoy helada./ Para mí sería taparte/ la felicidad soñada./ Tápame, tápame, tápame,/ tápame, tápame, que tengo frío./ Si tú quieres que te tape/ ven aquí cariño mío.// Una tarde de aguacero,/ la morena Soledad/ sin paraguas se calaba/ yendo mojadita ya./ Un pollo la quiso entonces/ con el suyo resguardar/ y llegó tan oportuno/ que ella dijo sin tardar:// Tápame, tápame, tápame...

Hubo en su vida muchas más canciones de las que iremos dando cuenta, como el charlestón "Yo quiero un auto" que llevaba letra y música de Bolaños, Jofré y Villajos, y que versionó también Reyes Castizo "La Yankee". Decía así: Yo me vuelvo loca/ por comprar un auto/ para por las tardes/ con él pasear,/ con mis gafas negras,/ siempre en el volante,/ mientras la bocina/ toco sin cesar./ Yo quiero un auto, papá,/ yo quiero un auto veloz,/ de portentoso arrancar/ y de tremenda emoción./ Yo quiero un auto, papá,/ todo pintado de azul,/ para poder escuchar/ el delicioso papú.

Aurora Mañanos Jaufrett, "La Goya", después de una carrera exitosa de 20 años, abandonó los escenarios el año 1927.

10 comentarios:

  1. Curiosa la vida de La Goya y qué populares sus cuplés. Citas a Joaquín Dicenta, autor de "Juan José", sin duda gran admirador de la "tonadillera intelectual" que, curiosamente, nada tiene que ver, salvo en su oficio de artista, con la mujer de su vida, la bailaora gitana Amparito de Triana.Interesante historia de amor que quedó en otra obra teatral escrita por su hijo del mismo nombre. Da mucho de sí tu serie sobre la copla, Emilio.

    ResponderEliminar
  2. Emilio Jiménez Díaz11 de mayo de 2010, 14:10

    Todo lo que guarda el tiempo tiene una historia interminable y, en este caso, hermosa. "La Goya", como Pastora Imperio, tuvo que ser una mujer genial. ¿Quién abandona el amor de un torero por el de un intelectual como Borrás?

    ResponderEliminar
  3. En este caso no cuajó la unión de una cantante con un torero, lo que ha llegado a ser casi "una costumbre española". (¿La Pantoja ha sido la última hasta ahora?). No tengo en la memoria el físico de Borrás, pero este Bombita era un dandy que fue portada de las revistas más leidas en España. No le faltaba clase, pero no cabe duda de que La Goya buscaba algo más...

    ResponderEliminar
  4. Según mis notas era muy "soso", muy maternal, muy antiguo para la época tan moderna que se vivía: noviazgo largo y decente, matriarcal, etc., y no consta que le gustasen las Artes ni las Letras. "La Goya" era todo lo contrario: dinámica, activa, intelectual, progresista, una mujer moderna que no aguantaba la "cara oculta" del torero, por muy guapo que fuese. Tomás Borrás era también un hombre atractivo y muy inteligente, y más al día en las "cosas" del amor.
    Esas son las anotaciones que tengo.

    ResponderEliminar
  5. ¡Ay, las cosas del amor son las que mandan! No sé si aquello que se decía siempre de un "buen mandao" tiene algo que ver. Permíteme la licencia en estos tiempos.

    ResponderEliminar
  6. Como anecdota os cuento que la manzanilla La Goya lleva este nombre por Aurora Jaufrett. Los aficionados a la copla y a la manzanilla no podemos pasar por alto estos detalles.

    ResponderEliminar
  7. Emilio Jiménez Díaz13 de mayo de 2010, 8:40

    Sí que es muy cierto. Lástima que este editor del blog no me permita nada más que una ilustración porque hubiese puesto también la etiqueta de la manzanilla que se le dedicó y que guardo en mi archivo.

    ResponderEliminar
  8. Don Emilio Jiménez Díaz. De mi mayor estima. Tengo más de 40 años de casado con natural de Bluefields, Nicaragua. Entre las anécdotas famliares me contó que su abuela, una señora que infundía miedo por su apariencia, cantaba la estrofa de Tápame (bis) (bis), ¿ cómo quieres que te tape si no soy tu marido ? (SIC) Recientemente en Florida, escuchó la estrofa en la voz de Karlos Arguiñano, mientras cocinaba un pastel. Yo le prometí encontrar el autor musical, letra e intérprete. Gracias por la información plasmada en tu trabajo realizado con versación y tino. Con afecto, Freddy Mora

    ResponderEliminar