viernes, 29 de octubre de 2010

DESDE MI TORRE: CORRER ES DE COBARDES


Con la guisa de este título se dirigía el gran jugador bético Rogelio Sosa al "mister" Antonio Barrios cuando este le conminaba gritando a que tenía que correr más la banda izquierda. Esa expresión afortunada, "correr es de cobardes", aún llega a nuestros días, y ahora viene que ni anillo al dedo a quien, sin que nadie le indique que corra o que deje de correr, le ha quitado el cetro al jamaicano Usain Bolt.

Conozco a este joven ex-vicesecretario general del PSOE-A, y diputado de su Parlamento, de verlo en Córdoba, en muchas ocasiones, siempre acompañado de sus adláteres y él mandando la conversación desde una posición segura de poder y juventud, pero sabiendo escuchar. No me extrañó, pues, cuando pegó el salto a Sevilla llamado por quien le aupó, José Antonio Griñán. Se veía en su porte seguridad e inteligencia para la política. Llegar al todo desde la nada, con sólo 36 años de edad, suele ser por dos cosas: por potra o por amiguismo. En él se dieron ambas cosas: la potra de llegar a concejal de su pueblo, Palma del Río, jovencísimo, y la manita del entonces alcalde del mismo, Salvador Blanco, pasando más tarde por la de Mario Jiménez y la del propio Griñán.

Ahora, este hombre huye hacia adelante, hacia la nada, y sin explicar claramente el por qué, que es lo que nos hace dudar a todos. Y más sabiéndose que los políticos no dejan un sillón ni con agua hirviendo. Alega motivos familiares y que se han ensañado con él por una supuesta subvención que la Junta le otorgó a la empresa de su mujer por valor cercano a unos 800.000 euros, nada, una limosnilla para ayudar a la casa, como hizo Chaves con la empresa de su hija acogiéndose a aquello tan antiguo de que "la caridad empieza por uno mismo". Se han cerrado miles de pequeñas y medianas empresas en Andalucía por falta su subvención..., pero los otros son los otros.

¿De qué huye, por que huye Rafael Velasco si no ha hecho nada reprochable? ¿De qué y para qué echarle cuenta a las "malinas" intenciones de los partidos contrarios? Hay que aguantar el tipo, se debe aguantar, y para eso está la Justicia. Si lo ha hecho, y por voluntad propia o indicación del partido se tira a correr, cuando ha alcanzado lo máximo en esa nueva profesión de la política, tan rápida en ascenso y promoción, debe pararse, quedarse en el sitio, dar la cara a las posibles investigaciones si es que hay motivo para ello. ¿Para qué, pues, tanta prisa?

Correr -aunque Rafael Velasco sea un experto en "karts" por tierras cordobesas- es de una cobardía absoluta, al menos que existan razones que le obliguen a apretar el acelerador.

Mucho me temo que, tras lo que podría ser y entenderse como un ejemplo de dignidad de dimisión de un vicesecretario se oculten otras cosas. Ni denuncio ni defiendo. Pero tengo el más legítimo derecho a la duda.

Cuando una persona como Rafael Velasco, con tanto poderío en sus manos y con tanto porvenir por delante, huye, no ha sido seguro por esos motivos familiares a los que tanto se acude en etapas imprecisas. ¿Correr? No. ¡Dignidad obliga a quedarse en el sitio y dar la cara!

6 comentarios:

  1. Los políticos parece que tienen su mundo, su idioma y su código que van unidos a intereses de tribu o casta. No le demos más vueltas: es imposible entenderlos. Otra cosa -curiosa paradoja- es que cada vez los conocemos mejor.

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  2. Aquí no hay más tribus y castas que el pueblo, que es el soberano. España está indignada con estos mediocres que nos representan y que se buscan todos los trucos de coaliciones para llegar al Poder, aprobar los presupuestos y tener mayores garantías de perpetuidad.
    Cuando cada día salta la liebre de otro escándalo político, sus charpas se unen no para denunciarlos, sino para taparlos lo más decentemente.
    Me da terror, pánico, miedo sensorial, que estas personas se burlen de la mayoría. Ya no estamos en la Edad Media, pero, querido Ángel: ¿A como lo parece?

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  3. Y tanto, Emilio; somos más vasallos que nunca. ¿No es una estampa medieval ver a estos señores comer mariscos con las manos grasientas mientras miembros del partido les ríe las gracias? Sólo ha cambiado el manjar: ahora son cigalas y antes muslos de pavo. Bueno, también el escenario, claro; antes era un castillo, ahora Casa Robles (o una feria en Bruselas).

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  4. Emilio Jiménez Díaz30 de octubre de 2010, 9:53

    He visto las fotografías del "Gran Mariscador" y me ha dado vergüenza ajena. ¿Puede aguantarse esto tal como está el país? Qué menos que un poco de mesura.

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  5. Desde Luego en lo de Velasco tieens toda la razón. Que gordo tiene que ser el asunto para que haya puesto "pies en polvorosa como se suele decir". Por cierto, aquí en Córdoba conozco a dos academias que lleva la pila de años en esto (no como la de la mujer de Velasco que el primer año de funcionamiento le dieron 184.000 euros de subvención)y sus respñonsable me dicen que es casi imposible que te den una subvención de estas y que ahora se explican el porqué. Por supuesto ninguna habla políticamente porque todavía tienen esperanza de que algún día le den alguna, es decir, tienen miedo a hablar. Que tristeza de país.

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  6. Emilio Jiménez Díaz2 de noviembre de 2010, 14:31

    Estamos en el país de las subvenciones, todo el mundo está subsidiado... con "derecho" al voto. Claro está que se eres familiar de... la subvención es más gorda,o la única para ese menester, y el voto, pues ya se sabe, como es el que te da de comer... Con cerca de 800.000 euros de "mamela" monto yo lo que se encarte. Pero eso no es honrado. Creo yo.

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