DESDE MI TORRE: EL ADIOS A MIGUEL SALCEDO HIERRO

Ayer, a la edad de 87 años, fallecía en su ciudad natal de Córdoba el gran humanista y Cronista Oficial de la Ciudad, Miguel Salcedo Hierro, con el que compartí en su vida muchos ratos de sincera amistad y largas conversaciones sobre temas que a ambos nos interesaban: el teatro, la historia y el arte, y hablando de amigos comunes, como José María de Mena, al que a él le unía una vieja y entrañable amistad.

Miguel Salcedo Hierro, un gran humanista, era un amenísimo conferenciante, escritor, profesor y director teatral y un excelente gastrónomo. Miembro de la Real Academia de Córdoba desde 1966 y Cronista desde 1989, su obra bibliográfica fue muy extensa e interesante, tanto en el apartado de divulgación artística como en el de la gastronomía: "El Alcázar de los Reyes Cristianos", "El Museo Julio Romero de Torres", "Córdoba en color", "La cocina andaluza", "Comer y beber con el refranero", "La tapa, novia de nuestros vinos" o "La Mezquita Catedral de Córdoba: templo universal, cumbre del arte, vivero de historias y leyendas", entre otros muchos títulos.

A él se debe la iniciación de los estudios de Arte Dramático en Córdoba desde 1947, así como la fundación de su Escuela Superior, de la que fue director hasta su jubilación en 1988. Fue también uno de los miembros fundadores de la "Asociación de Amigos de los Patios" que tanto bien hizo para la conservación de estos espacios que hoy son un atractivo turístico.

Recuerdo que en cierta ocasión me presentó con motivo de un pregón en la Casa de Sevilla en Córdoba y, como tenía una memoria excepcional, sin papel alguno se llevó hablando de mí largo tiempo sin olvidarse ni un solo dato significativo, con una dicción perfecta y sabiendo cómo poner al público en disposición.

Mi sentido pésame a su mujer, a su hija Marisol y a sus familiares. ¡Descanse en paz quien además de bueno fue un sabio al que jamás le pagará Córdoba cuanto hizo por la ciudad de sus amores!

(Fotografía de Juan Carlos Molina. Diario Córdoba)