MANUEL DOMÍNGUEZ "EL RUBIO"De un patricio romano su cabeza,
perfil de una moneda de Tartessos,
sueña en la lejanía mil universos,
en la guitarra, el arte y la belleza.
No falta en su mirada la agudeza.
No falta en su mirada la agudeza.
A sus manos le falta la sonanta
para sacarle de su vientre tanta
armonía escondida en su pureza.
¡Cuántas noches de arte por la vida!
¡Cuántas noches de arte por la vida!
¡Cuántos ratos cuajados de emociones!
¡Cuánto bordón y primas y falsetas!
Te fuiste tan de pronto que aún herida
sigue Triana, buscando las canciones
que al irte se quedaron incompletas.
Creo que Manolo era un extraordinario intérprete de la guitarra. Compartí con él ratos y conferencias y me pareció un artista impresionante. Como tantos otros, con escaso reconocimiento a su trayectoria y a su genio.
ResponderEliminarEra un auténtico genio y, como tú dices, con escaso reconocimiento. Como artista era uno de los grandes, al menos para mí, y como persona generosa, cariñosa, volcada con sus amigos, no tenía parangón.
ResponderEliminarLoli y yo le teníamos un gran respeto como artista y un gran cariño como amigo. La vida nos lo arrebató demasiado pronto.