lunes, 22 de marzo de 2010

DESDE MI TORRE: UN DIOS DE PERDÓN


Ya pasó todo. Media Sevilla te estará sacando en las tertulias a hombros y la otra media, la Sevilla oscurantista de siempre, dirá que ha sido el peor pregón de la Semana Santa de Sevilla porque no has rimado pena con Macarena, bonanza con Esperanza, calle con Valle, mustia con Angustias, chorro con Cachorro, penitente con puente ni maravilla con Sevilla. Te lo decía ayer por la mañana en esta misma página: que tu palabra iba a ser la palabra de la verdad, incontaminada de inciensos y beaterías de falsos capillitas; que iba a ser la que le habla al Dios que cada uno lleva dentro; que tendría sabor a ti, a surcos y besanas; que sería una palabra para quedarse pegada a la epidermis como el sol labrantío de tu tierra.

Ayer, fíjate, parecía que era yo quien daba tu pregón. Desde que me levanté: más o menos desde que lo hace el gallo, porque los viejos solemos dormir poco, le recé un Avemaría a la Estrella que tengo en mi dormitorio para pedir por ti. A las 12 en punto, le dije a Lola: ¡Ya está Antonio en el estrado!... Y camino de mis nuevos perfiles de calles y bodegas, calculada la hora de triunfo, llamé a mi amigo Juan Cembrano para preguntarle. Y me bastó su palabra sincera para saber y sentir que te has ganado a Sevilla a golpes de "levantás súbitas" y paso a paso de alpargatas esparteñas. Cuando he podido leer lo que ponen todos los periódicos, me he emocionado: El Dios que ande por mi, el Dios que digo/ es un Dios de perdón, no de castigo;/ Y acaricia mi duda y no se espanta/ de mis debilidades. No se aflije:/ Si ve que me equivoco, me corrije,/ y si ve que me caigo, me levanta...

Espero que haya estado allí el hermano mayor de Los Javieres, y otros como él, para aprender de tí, para saber que Dios es de todos. Esos hipócritas que se hubiesen cagado en los muertos de Pilatos si hubiese absuelto a Cristo y "ellos" se hubiesen quedado sin la Semana Santa que tú has cantado con un Dios vivo entre tus labios.

2 comentarios:

  1. Manuel Bohórquez23 de marzo de 2010, 1:59

    No he escuchado en mi vida el Pregón de la Semana Santa, así que no sé ni lo que es eso. Sabía que lo daba este año Antonio García Barbeito y recuerdo que a través de un correo lo animé. Parece que hay división de opiniones, lo que es bueno. Si quieres que te sea sincero, compadre, me cuesta creer que el Barbeito que yo conocí hace años haya sido capaz de pregonar la Semana Santa y besar la mano de un arzobispo. Ha cambiado, sin duda. Si el cambio lo hace un hombre feliz, estaré contento, porque Antonio me ayudó mucho hace años y le estaré eternamente agradecido, como a ti y a otras muchas personas. No escuché el pregón porque hay cosas que le superan a uno.

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  2. Me ha dado mucha alegría por él y por la lección que le ha dado a una Sevilla tan hipócrita en muchas cosas como esta de las hermandades: en las que miran con lupa si uno es separado o no, sin entra o no en la iglesia, si se confiesa o se deja de confesar. Si querían un pregón a su gusto, se le fueron vivos: Ramón Charlo, Manolo Garrido, Rafael Montesinos, Manuel Lozano, Manolo Pacheco...
    Barbeito ha hecho el pregón que él ha querido hacer y, como siempre, ha habido división de opiniones.

    Un fuerte abrazo: Emilio

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