martes, 1 de enero de 2013

DESDE MI TORRE: FELIZ 2000 Y ALGO...


Lo inauguramos hace algunas horas y ya se me ponen los vellos de punta. Muchos se habrán levantado hoy con una resaca tremenda, si es que se han levantado, y otros, después de cómo han empezado las cosas con la subida de impuestos por todos lados, habrán preferido seguir siendo unos camastrones de mucho cuidado. ¡Pues, ánimo, a levantarse y a encararse a la vida con vehemencia! Eso sí: pasito a paso y sin sobresaltos. No lea la prensa, no escuche la radio ni vea la televisión, y así, de esta manera tan sencilla, no se pondrá malo de los nervios. No tome en cuenta la carestía de la vida aunque no le hayan subido su nómina. Sufra en secreto, tómese un café menos cada día, que un paquete de tabaco le dure una semana,  que la "Cruzcampo" se vaya dilatando en su consumo, acostúmbrese a las papas en amarillo con una hojita de laurel, que están exquisitas, deje los filetes y las puntas de solomillo, y verá cómo en dos o tres semanas está hecho un figurín: sin nervios, sin toses mañaneras, sin gases "gambrineros", sin grasas y sin colesterol. ¿No se acuerda de aquellas fotografías de su padre y sus tíos en la posguerra, que tenían cuerpos de sílfides? Pues hay que ir a eso. A las dos o tres semanas, tendrá usted un tipo sensacional, aunque le den mareos y se le caiga la baba ante el escaparate de una charcutería. Fe y ánimo. Que le suben la luz, pues apáguela y baile con su parienta -cantándolos ustedes, por supuesto- los boleros de Linda Ronstadt. Verá qué placentera velada. Que le suben el autobús y usted tiene el trabajo a diez kilómetros: nada de apuros, que andando andando se llega a Roma. ¿Y lo bien que le va a venir para que se le pongan las cachas cantúas y los músculos como el hierro? Todo es por nuestro bien, por su bien, desagradecido, que el gobierno de Rajoy sólo mira por nosotros para que no seamos unos cafres y nos fumemos dos cajetillas de cigarrillos, para que no engordemos, para que bailemos más, para que no nos metamos en los bares, que son unos antros de perdición, y para que tengamos una dieta equilibrada, ni siquiera mediterránea, sino del Mar Negro, que es el que han logrado poner ante la puerta de nuestras vidas.

Tómese este año a cachondeo, pero que muy a cachondeo, y de lo primero que tiene que cachondearse es de este gobierno de aprendices a políticos, de estos caraduras que venden palabras hueras para conseguir el voto convirtiéndose en auténticos "Pinochos" -con permiso del alma de madera de Geppetto-, de estos trincones de mucho cuidado, de estos malabaristas de unos números cuyos bolos siempre se caen encima del trabajador... ¡Tranqui, Emilio, que el primero que tiene que tranquilizarse eres tú! ¡Pues, bueno, eso, que no se alteren en absoluto, que este año "innombrable" pasará pronto (por los cojones) y que se agarren al dicho eterno de que no hay mal que cien años dure..., ni cuerpo que lo resista.  

¿Más consejos? Con esos basta para que pesemos todos menos que medio kilo de fideos. Lo que no han conseguido dietas ni caros gimnasios, bicicletas y carreras, lo está consiguiendo este gallego -¿qué le habremos hecho España a los gallegos que siempre nos toca la china en nuestras épocas más negras?-, un gallego que jamás ha sabido ni va a saber qué es la pobreza en su casa, ni en la de sus amigos de cancha, pero que va a tener a sus pies un país entero sumido en la más absoluta pobreza.

Pero, usted, nada de nada, ánimo, hombre, y prepárese de nuevo para darle su voto cuando toque, auque entonces esté usted más desfigurado que la "Canina" del Santo Entierro. ¡Ánimo, y no se me venga abajo!


6 comentarios:

  1. Texto para pegarlo en el frigorífico en grande, bien grande.
    Antes la gente reía más; a lo mejor, eso que tú dices, Emilio, nos da por reírnos de todo, empezando por Rajoy. A ver si lo desorientamos aún más...

    ResponderEliminar
  2. Haría falta, Ángel, un frigorífico muy grande para la pegatina de mis consejos, uno de esos industriales. Pero lo que sí es cierto es que debemos reírnos a mandíbula batiente de este gobierno encabezado por Rajoy y no dar puntadas sin hilo. Recuerdo que Loli, que no sabía ni entendía de política, se ponía nerviosa cada vez que salía el gachó en televisión. Y siempre me decçia: ¡No me gusta este tío, Emilio, no me gusta! Ella llevaba razón, ya no le gusta este tipo del TBO a más de cuarenta millones de españoles.

    ResponderEliminar
  3. Pero qué tarde se han dado cuenta muchos de los que le votaron...; a ellos le dedicará sus primeras burlas cada día. ¡Pobres ilusos!

    ResponderEliminar
  4. Hola, Emilio. Acabo de descubrir tu blog, que me recomienda una persona muy allegada a tí. ¡Cuánto me alegro, ella tenía mucha razón al hacerlo y toda la vida se lo agradeceré, (es Esperanza).

    Has plasmado con fina ironía una realidad enorme que padecemos en la lamentable actualidad. Todo un aldabonazo a la reflexión y a empezar a sacudirnos muchas cosas, sobre todo, entiendo que a reaccionar, convencidos a estas alturas que los políticos la banca y los poderosos no nos sacarán de esta, sino que por sus causas nos metieron en esto...que mucho me temo sea para años y años. Soy madre de familia numerosa, me preocupa muchísimo el presente, sobre todo, el de nuestro hijos, que no les veo futuro así.

    Gracias por tus aportaciones, tan claras y certeras. Ya iré viendo más detenidamente, lo que voy mirando me gusta y coincido contigo.Bueno, ya tienes una seguidora entusiasta más.

    Saludos desde Gines

    Mari Carmen.

    ResponderEliminar
  5. Demasiado tarde se han dado cuenta los votantes. Espero que en las próximas, como ya todos estamos con la mosca detrás de la oreja, otro gallo cantará.

    ResponderEliminar
  6. Estimada Mari Carmen: Bienvenida al blog y me alegro mucho de que le esté gustando. Estoy seguro de que compartiremos en estas páginas muchas opiniones. Tengamos esperanza en el que el futuro mejore, aunque es difícil.

    Un cordial saludo.

    ResponderEliminar