lunes, 23 de abril de 2012

PORTADA DE FERIA: UNA FERIA PARA LA CRISIS


Cuando hoy den las 12 de la madrugada, Sevilla de nuevo levantará el telón de un año más de Feria, eclosión de luz y color, aunque el pueblo llano tendrá más vacíos los bolsillos y se notará, sin duda alguna, tanto en los días establecidos de visita al recinto, como en el consumo que se haga en el ferial y en las más escasas vueltas de los niños en los cacharritos. No hablemos de la merma en nuevos trajes de gitanas. No está la cosa para gastos. Los únicos reyes de la Feria serán los de siempre, aquellos que tienen las arcas repletas, la caseta en propiedad y el coche de caballos a punto, con cuantos más tiros mejor que mejor, aunque estos potentados serán menos vistos y envidiados que en años anteriores, porque, como digo, las familias normales optarán por una reducción drástica en esta fiesta ciertamente costosa.

La reproducción de la Iglesia del Salvador ha venido de nuevo a traernos las clásicas portadas que se habían perdido en aras de una modernidad mal entendida, y mañana la prensa nos ofrecerá las imágenes del alcalde Zoido dándole al botón del encendido, nos contará el ambiente y la cantidad de miles de bombillas que lucen tanto en el Real como en la portada. La noria de los años...

Correrá la manzanilla sanluqueña, como siempre, el rebujito y esa cosa nueva que tanto están anunciando por la radio y que me parece haber oído que se llama "Sarandonga", de cuya sociedad es presidente, al parecer, el locutor Carlos Herrera. Pero correrán más lentas estas bebidas, al ritmo preocupante de las carteras, que el gobierno se está encargando de dejárnoslas vacías en poco más de tres meses.

No sé si podré asistir algún día ni si tendré ganas. No está mi cuerpo para fiestas. Pero lógico es que felicite a mis paisanos porque son ellos los que con su alegría hacen grande a esta celebración lúdica sin parangón en el mundo. Con crisis o sin ella, Sevilla, en los terrenos de Triana, volverá a lucir su esplendidez en las calles feriales de taurinos nombres. Si hay para una botella menos, pues una menos. Si en vez de langostinos hay que recurrir, de nuevo, a los filetes empanados de casa, pues se hace, pero un ratito de Feria, aunque sea corto y mermado de posibles, no se lo puede quitar nadie. ¿Que hay crisis? Pues que se aguante unos días..., a pesar de que Rajoy nos diga lo contrario

(Fotografía: JOSÉ MANUEL HOLGADO)

2 comentarios:

  1. Espero, querido Emilio, que ni la crisis ni nuestros políticos hagan sombra a nuestra feria. Es una semana para convivir con los amigos y olvidarse de los problemas; en definitiva, el mejor tratamiento anticrisis que conocemos. Por supuesto que te esperamos; ya sabes que tienes caseta, casa, cama, manzanilla y jamón. Lo de la "sarangonga" lo dejaremos para otro momento.

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  2. Pero la crisis se va a notar, aunque después nos hablen de la tan manida cifra de un millón de visitantes, etc.
    Espero vernos mañana para tomar esa copa prometida y pasar un buen rato entre todos los amigos. Necesito cargarme un poco las pilas.

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