Quizás el himno que más nos ha llenado tanto musicalmente como en el mensaje de su letra haya sido el oficial de la Legión, también llamado como "La Canción del Legionario", compuesta por Emilio Guillén Pedemonti, y con letra de Modesto Romero, aunque no es la única manifestación musical de este colectivo. El himno oficial, del que adjunto la partitura, dice así:
Soy valiente y leal legionario / soy soldado de brava legión / pesa en mi alma doliente calvario / que en el fuego busca redención. / Mi divisa no conoce el miedo, / mi destino tan solo es sufrir / mi bandera lucha con denuedo / hasta conseguir / vencer o morir. / Legionario, legionario / que te entregas a luchar / y al azar dejas tu suerte, / pues tu vida es sólo azar, / legionario, legionario / de bravura sin igual, / si en la guerra hallas la muerte / tendrás siempre por sudario / legionario / la bandera nacional. / ¡Legionario a luchar, / legionario a morir! / Somos héroes incógnitos todos / nadie aspire a saber quien soy yo / mi tragedia es de diversos modos / que el correr de la vida formó. / Cada uno será lo que quiera / nada importa saber quien soy yo / pero juntos formamos bandera / que a Legión da el más alto honor. / Legionario, legionario / que te entregas a luchar / y al azar dejas tu suerte, / pues tu vida es solo azar, / legionario, legionario / de bravura sin igual, / si en la guerra hallas la muerte / tendrás siempre por sudario / legionario / la bandera nacional. / ¡Legionario a luchar, / legionario a morir!
Aparte del himno que hemos recordado, quizás la canción más emblemática de la Legión sea un cuplé que la artista Lola Montes cantaba por los años 20: "El novio de la muerte", que ya recordábamos en los inicios de "Canciones por nuestras vidas" ( ver entrada del blog día 11 junio de 2010). Aunque atribuído su estreno inicialmente a la también cupletera Salud Ruiz, pudo comprobarse que fue efectivamente Mercedes Fernández "Lola Montes" quien lo estrenó, con un éxito extraordinario, en el teatro Vital Aza de Málaga el año 1921. La letra de esta hermosísima canción es de Fidel Prado y la autoría musical de Juan Costa. El año 1952, el director musical de la banda del Tercio de Ceuta, Ángel García Ruiz, serenó su ritmo adaptándolo para el paso procesional de las cofradías de Semana Santa, convirtiendo este tema en una singular composición para escuchar:
Nadie en el Tercio sabía / quién era aquel legionario / tan audaz y temerario / que en la Legión se alistó. / Nadie sabía su historia, / más la Legión suponía / que un gran dolor le mordía / como un lobo el corazón. / Cuanto más rudo era el fuego / y la pelea más fiera, / defendiendo su Bandera, / el legionario avanzó. / Y sin temer el empuje / del enemigo exaltado, / supo morir como un bravo / y la enseña rescató. / Y al regar con su sangre la tierra ardiente, / murmuró el legionario con voz doliente: / Soy un hombre a quien la suerte / hirió con zarpa de fiera. / Soy un novio de la muerte / que va a unirse en lazo fuerte / con tal leal compañera. / Cuando al fin le recogieron, / entre su pecho encontraron / una carta y un retrato / de una divina mujer. / Y aquella carta decía: / "...si Dios un día te llama, / para mí un puesto reclama, / que a buscarte pronto iré". / Y en el último beso que le enviaba, / su postrer despedida le consagraba. / Por ir a tu lado a verte, / mi más leal compañera, / me hice novio de la muerte, / la estreché con lazo fuerte / y su amor fue mi Bandera.
A todos, sin duda, nos emociona cuando la escuchamos esta canción de "El novio de la muerte", que fue especialmente singular en la guerra de Marruecos. Es una canción, pero que se ha convertido en el himno no oficialista de la Legión, esa Legión cuyo primer himno, antes que "La Canción del Legionario", fue el siguiente:
Tercios heroicos, Legión valiente, / que en la vanguardia sabéis morir, / son el orgullo de nuestra España, / vuestras hazañas al combatir. / Los que en España no habéis nacido / y sangre y vida dais en su honor, / hijos de España sois predilectos, / que habéis ganado su excelso amor. / Legionarios, a luchar, / legionarios, a morir. / Legionarios, a luchar, / legionarios a morir. // ¡Viva España!, valientes hermanos. / ¡Viva España!, Legión inmortal, / que es gran gloria morir por España, / abrazado a sublime ideal. / Con la sangre que vierten sus hijos, / más frondoso el laurel brotará, / del que haremos coronas que España / en sus sienes augustas pondrá. / ¡Viva España! / ¡Viva la Legión! // Ya surja ruda, feroz pelea, / o de la lucha cese el afán / notad que os cercan siempre amorosas / sutiles sombras que un beso os dan. / El pensamiento de España entera / vedlo en el tenue fugaz rumor / que nunca cesa de acariciaros / de vuestros pasos alrededor. / Legionarios, a luchar, / legionarios, a morir. / Legionarios, a luchar, / legionarios a morir. // ¡Viva España!, valientes hermanos. / ¡Viva España!, Legión inmortal, / que es gran gloria morir por España, / abrazado a sublime ideal. / Con la sangre que vierten sus hijos, / más frondoso el laurel brotará, / del que haremos coronas que España / en sus sienes augustas pondrá. / ¡Viva España! / ¡Viva la Legión! // Tercios invictos, Legión de bravos / al mundo entero, con altivez, / podéis mirarlo, porque vosotros / del mundo entero sois honra y prez. / Donde el caído lloró angustiado, / donde un hermano la vida dio, / donde traiciones piden venganza / nuestra bravura siempre acudió. / Legionarios, a luchar; / legionarios, a morir. / Legionarios, a luchar, / legionarios a morir. // ¡Viva España!, valientes hermanos. / ¡Viva España!, Legión inmortal, / que es gran gloria morir por España, / abrazado a sublime ideal. / Con la sangre que vierten sus hijos, / más frondoso el laurel brotará, / del que haremos coronas que España / en sus sienes augustas pondrá. / ¡Viva España! / ¡Viva la Legión.
La Legión goza también de otro tema, no oficial, que canta en marchas, campamentos, etc., titulado "Como somos caballeros leginarios", que nos habla de la animadversión de algunas personas hacia este cuerpo militar:
Como somos Caballeros Legionarios, / hay mucha gente que no nos camela, / como si fuera un delito, / ser de la Legión Extranjera. / Nosotros no nos preocupamos / ni del más grande ni del más chico, / ni tampoco olvidamos / ni a los pobres ni a los ricos. / Cuando vamos por la carretera, / y nuestras carnes se tuestan al sol, / la sangre de nuestras venas es igual que la mejor. / Si asaltamos los corrales / y robamos las gallinas / es para calmar el hambre / que pasamos en la vida. / Y aunque a nadie le importa el sufrimiento / que un legionario lleva en el corazón, / demostramos que estamos satisfechos / y llevamos en el pecho el emblema de La Legión. / Si cantamos soleares / o bailamos bulerías / es para olvidar las penas, / que pasamos en la vida. / Y aunque a nadie le importa el sufrimiento / que un legionario lleva en el corazón, / demostramos que estamos satisfechos / y llevamos en el pecho el emblema de La Legión.
Mañana nos adentraremos por el camino de otros temas, himnos y canciones de ambos bandos en la Guerra Civil, y de guerras anteriores en las que intervino el ejército español.
Mañana nos adentraremos por el camino de otros temas, himnos y canciones de ambos bandos en la Guerra Civil, y de guerras anteriores en las que intervino el ejército español.
Gracias por publicar la historia (y la letra) de "El novio de la muerte". Llevaba años detrás de las dos cosas. Yo, que soy poco de himnos militares, tengo que reconocer que esta canción en concreto consigue siempre emocionarme. Lo dicho, gracias.
ResponderEliminarMe alegra de que te haya sido de utilidad. La verdad es que ambos himnos son extraordinarios y emocionan a las personas sensibles.
ResponderEliminarEspero sigas visitando el blog. Cientos de canciones nos esperan.